Verano 2015: Alimentos para mantenerse bien hidratados

Una baja ingesta de líquidos no sólo ocasiona deshidratación, sino que además aumenta el riesgo de formación de cálculos renales, genera estreñimiento, acumulación de toxinas, entre otros problemas, comentó el doctor Arnaldo Hurtado, nutriólogo de Laive, indicando que los niños y bebés, al igual que los adultos mayores, son quienes están más expuestos a sufrir deshidratación.

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“Recordemos que en verano debemos consumir la suficiente cantidad de líquidos para evitar deshidratarnos, sobre todo si tomamos sol, porque es justamente allí donde la piel pierde agua”, explicó el especialista luego de recomendar las siguientes opciones:

AGUA: Al día, las personas pierden alrededor de dos litros de agua y sales entre las pérdidas sensibles (orina, sudor, etc) y las pérdidas insensibles (respiración, producción de saliva, jugos gástricos, etc). Por ello, lo adecuado en época de verano es consumir por lo menos dos litros de agua (ocho vasos).  Este consumo puede aumentar dependiendo de la intensidad del calor y de la actividad física que se realice.

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FRUTAS Y VERDURAS: melón, sandía, piña, naranja, peras, fresas figuran como las de mayor contenido de agua. Entre las verduras, se encuentra el tomate, apio, pepino, entre otras.

JUGOS: ya sean de fruta natural o néctar de frutas, se debe considerar el aporte calórico del azúcar.

BEBIDAS REHIDRATANTES: Este tipo de bebidas aportan los minerales que se pierden al sudar como sodio, potasio, cloro, entre otros. Son muy útiles para deportistas. Sin embargo, para quienes desean perder peso, se debe considerar las calorías que contiene (150 calorías por botella).

LÁCTEOS: Un vaso de leche descremada contiene 70 calorías y es una excelente opción para calmar la sed. Aporta proteínas de alto valor biológico que hacen que el músculo se recupere con mayor facilidad de las actividades físicas realizadas. Otro beneficio demostrado en estudios clínicos es que el consumo frecuente de lácteos bajos en grasa está relacionado a la pérdida de peso, debido a la presencia del calcio láctico. 

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