Las relaciones duraderas se reducirían en dos cualidades básicas

¿Sabes cuál es el secreto para que tu relación sea duradera? La ciencia dice que los componentes más importantes para que ello resulte se resumirían en dos cualidades básicas; la amabilidad y generosidad.

Te puede interesar: 5 tips para que tu relación de pareja funcioneAnte la ola de crisis en parejas matrimoniales, en quienes cada vez se ven más divorcios, los científicos sociales comenzaron a estudiarlos observándolos en acción. La preocupación por el impacto que tendrían los divorcios sobre los hijos, los motivó a que llevaran a las parejas a un laboratorio para averiguar cuáles eran los ingredientes para una relación saludable y duradera.El psicólogo John Gottman fue uno de esos investigadores que ha venido estudiando estos casos con la intención de averiguar qué hace que las relaciones funcionen. En 1986, Gottman comenzó a reunir descubrimientos muy importantes. Fue cuando estableció The Love Lab [El laboratorio del amor] junto a su colega Robert Levenson en la Universidad de Washington. Ellos llevaron al laboratorio a recién casados y les observaron interactuar entre ellos. Con un equipo de investigadores, pusieron electrodos a las parejas y les pidieron que hablasen sobre su relación, asuntos como dónde se conocieron, un conflicto importante que estuvieran afrontando juntos y un recuerdo positivo que tuviesen. A partir de los datos que recogieron, Gottman separó a las parejas en dos grupos principales: las expertas y las desastrosas. Las expertas seguían felizmente juntas después de seis años. Las desastrosas o se habían divorciado o estaban crónicamente infelices en sus matrimonios.Cuando los investigadores analizaron los datos que reunieron sobre las parejas, vieron diferencias claras entre las expertas y las desastrosas. Las desastrosas parecían calmadas durante las entrevistas, pero su fisiología, medida por los electrodos, contaba una historia diferente. Su frecuencia cardiaca era elevada, sus glándulas sudoríparas se encontraban activas y su flujo sanguíneo era rápido. Siguiendo a miles de parejas en un estudio longitudinal, Gottman descubrió que cuanto más se activaban fisiológicamente las parejas en el laboratorio, antes se deterioraban sus relaciones.En cambio, las parejas expertas demostraron que habían creado un clima de confianza e intimidad, que les hacía sentirse más cómodas emocionalmente demostraron un comportamiento cálido y afectuoso y eso se veía reflejado físicamente.Un segundo estudio elaborado en 1990, Gottman diseñó un laboratorio en el campus de la Universidad de Washington que se parecía a un hermoso retiro en régimen de alojamiento y desayuno. Para ello invitó a 130 parejas recién casadas a pasar el día en este retiro y las observó mientras hacían lo que las parejas hacen normalmente en vacaciones: cocinar, limpiar, escuchar música, comer, hablar y pasar el rato.Aquí Gottman hizo un descubrimiento fundamental. Se dio cuenta de dos comportamientos claves. Las personas que acogieron a sus parejas durante el estudio respondieron implicándose con el peticionista, mostrando interés y apoyo en la petición. En tanto quienes no lo hicieron, las que se alejaron, no respondieron o respondieron mínimamente y siguieron con lo que estaban haciendo, como mirar la televisión o leer el periódico y quienes veces respondían con una hostilidad diciendo algo como: «Deja de interrumpirme, estoy leyendo», tuvieron profundos efectos en el bienestar marital. Observando estos tipos de interacciones, Gottman pudo predecir con un 94 por ciento de certeza si las parejas se romperían, permanecerían juntas e infelices o juntas y felices varios años después. Pues se dio cuenta que ello dependía del espíritu que las parejas traigan a la relación. ¿Cómo actúan en pareja con amabilidad y generosidad, o desprecio, crítica y hostilidad?De ahí, según el estudio, que la amabilidad uniría a las parejas. Además otra investigación independiente de la suya demostró que la amabilidad (junto con la estabilidad emocional) es el factor más importante de satisfacción y estabilidad en un matrimonio. Por lo que la amabilidad hace que cada miembro de la pareja se sienta cuidado, comprendido y validado, que se sienta querido. 

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