El vínculo entre un dueño y su perro se asemeja al de una madre y un hijo

¿Amas a tu mascota como a tu propio hijo? Esta conducta sería completamente natural según un grupo de investigadores de Massachusetts, quienes han revelado que el cerebro de las mujeres es capaz de formar un vínculo especial tanto con niños como con perros y se asemeja mucho al trato de una madre y un hijo. Ahora entendemos por qué nos ponemos tan tiernas cada vez que vemos un cachorro.

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Decididos a entender la razón que llevaba a muchas mujeres a tratar a sus perros comos a sus propios hijos, los investigadores realizaron un experimento en el que participaron 14 mujeres que tenían hijos entre 2 y 10 años, ellas además contaban con una mascota en casa. 

La dinámica de dicho estudio se basó en la observación. Las mujeres objeto de estudio tuvieron que ver fotografías de ellos. De ahí se supo que sus redes neuronales se veían activadas de igual modo, cuando veían la imagen de ambos. 

Las conclusiones llegadas a raíz de este hallazgo demostraron por medio de las imágenes de escáneres de resonancia magnética, que las partes del cerebro relacionadas con las emociones, la recompensa y la interacción social recibió más oxígeno cuando se les mostraban las fotos de sus hijos o mascotas, y menos cuando veían niños y mascotas ajenas. 

De otro lado, se supo que la Sustancia Nigra y el Área Tegmental Ventral, región encargada de la formación de vínculos se vio únicamente afectada en respuesta a imágenes del hijo de la participante. En tanto el giro fusiforme, involucrado en el reconocimiento facial, mostró una mayor respuesta al ver la imagen del perro antes que del hijo.

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“Aunque este es un estudio pequeño que puede no aplicarse a otros individuos, los resultados sugieren que hay una importante red neuronal común en la formación y mantenimiento de vínculos estrechos que se activa cuando las madres miran tanto las imágenes de sus hijos como de sus perros" señaló al respecto uno de los investigadores.